Emplazamiento de la torreta desde el sur
Restos de la torreta de Tartafaya, lado suroeste
Detalle del aparejo, muy mermado y erosionado
Piedra de cortar cabezas, a escasos metros de la torrera
La Peña del Mediodía desde la torreta
En esta ocasión nos desplazaremos a la zona sur de la comarca de la Hoya de Huesca, muy cerca de la linde con la vecina comarca de Los Monegros. Encontramos
los restos de la torreta del Tartafaya al norte de Piracés, algo más elevada que la Peña del Mediodía, que queda a 200 metros escasos del torreón. Podemos llegar desde la ermita de La Virgen de la Corona o, como lo hicimos nosotros, desde la carretera de acceso al pueblo, "por donde Dios nos de a entender".
En lo alto de un montículo de arenisca subsisten los arranques de un torreón de planta cuadrangular, de 5.70 x 4.70 metros. Sus lados este y sur están rodeados por dos líneas de muralla bien ensamblada, de la que todavía perviven varias hiladas. El aparejo es de piedra sillar de arenisca, ligado con mortero de cal. Es un lugar estratégico con unas magníficas vistas en las que se domina una amplia porción de terreno.
Junto a los restos de la torreta se encuentra "la piedra de cortar cabezas". Así se la conoce según la tradición oral, recogida por Eugenio Monesma. Se cree que en esta piedra los cristianos decapitaban a "los moros". Se trata de un bloque monolítico y rectangular, con una cruz grabada en su zona central.
Ya documentó Adolfo Castán la torreta de Tartafaya en su libro: Torres y Castillos del Altoaragón. Castán apunta que su cronología debe llevarse a finales del siglo IX o comienzos del X, ocupando un puesto destacado en el sistema defensivo de la madina de Huesca. Fue reconquistado por el rey Pedro I en el año 1103, año en el que aparece documentado el primer tenente, el señor Orti Ortíz.
A su lado la impresionante Peña del Mediodía, cuya plataforma superior presenta excavaciones rectangulares en la arenisca con escalones y agujeros para postes de madera.